lunes, 29 de septiembre de 2008

Marea



Que mal siento todo.
¿Cuándo irá a acabar?
Yo nunca entiendo.
Tendré que matar.

Estos sucios momentos
me hacen desesperar,
complican mis pasos
para hacerme tropezar.

Tu tranquilo,
se va a pasar,
siempre lo hace
es como el mar.

Es tan extraño
volver a mirar
con distintos ojos
un mismo lugar.

Voy a caerme,
me voy a parar,
mantente despierto
y guía mi andar.

No es que yo no pueda
es sólo que quiero descansar,
necesito un minuto
para recordar cómo escapar.

Así como la marea a las rocas,
a mí me han de golpear
estos malditos momentos.
Soy como el mar.


lunes, 15 de septiembre de 2008

Al Mago


Eres tu, el mago de los secretos,

aquel que con sólo una mirada
cambia la palidez de mi cara

por un leve rubor de dalia.


Actos de magia alucinantes son los que tu haces,

te apareces y desapareces de mi mente
no sé cómo,
en tan sólo instantes.

Sabes llegar al momento justo y dirigirme la palabra indicada,
con tu dulce boca de camelia,

aquellos labios encantados.


Posees un baúl de paciencia
de donde sacas trocitos y trocitos de ella,

el baúl maravilloso, el baúl interminable.

Yo te admiro mago de ojos dorados,

mago de los sueños,
mago apasionado...

mago insistente
, lento, preocupado,
sonriente, estimado,

mago soñador,

mago que desea,
que sufre,
que ama, que piensa...


Dices siempre cosas bellas, dulce mago...
eres impaciente, dulce mago...

eres lo que pienso, dulce mago...

a quien realmente siento, dulce mago...
eres mi presente... amado mago.



Visitante de mis sueños

Hey tu!
Visitante de mis sueños,
ladrón de pensamientos,
gestor de deseos,
hombre de los secretos...
¿Cómo osas robarte mis pensamientos cada noche
cuando ya exhausta me voy a acostar?


Es que eres astuto, pues a mi mente sabes entrar, devastando cualquier otra preocupación, siempre queriéndote quedar. Podría jurar que te has vuelto habitante de mi oído pues te oigo cantar en todas partes, en cada paso de mi andar tu voz aparece y me hace detener el paso y ponerme a pensar... en ti pienso. El problema es que, al suceder todo ésto, golpeo con insistencia mi cabeza y nada sucede, pareces no estar físicamente ahí y luego me pregunto... ¿Cómo puede ser que te adueñes de tantos momentos que son tan míos sin siquiera dudar? Debo admitir que todo esto no me molesta, más bien, me gusta... me gusta mucho que me visites a cada instante y espero cada noche para en sueños volverte a encontrar, visitante de mis sueños... persona ideal.