viernes, 25 de mayo de 2007

A mis amigos...



Y pensar que pasó el tiempo, pasaron las dificultades... toda aquella aglomeración de sucesos que sin duda hizo que tuviéramos ciertos roces. Pasó todo aquello y temí que se destruyera ese "nosotros" que, tal vez, sin querer formamos. Temí perderlos para siempre, también, por la simple fragilidad de ésta cabeza mía que es algo loca a instantes y que luego de un tiempo se cuestiona lo sucedido y vuelve a pensar, justo ahora, en lo que estuvo bien y en lo que estuvo mal.
A pesar de todo aquello, nuestros lazos, todo aquel cariño, pudo mas y no permitió que las circunstancias no fueran motivo de la ruptura de éste lazo que tanto nos costó crear.

Han pasado los meses y las cosas ya no son las mismas... dejé atrás todo aquello que alguna vez nos distanció y se puede decir que he vuelto a ser yo pero a la vez ya no soy ese "yo" que era antes. Tengo mi burbuja nuevamente y estoy segura que ustedes también la tienen, sólo que quizás no se percatan de aquello, somos todos unas burbujitas caminando por la ciudad... la ciudad de verdad, aquel lugar en el que puedes llegar a sentirte realmente solo, porque eres sólo tu, luchando por lo que quieres en un mundo nuevo, un mundo que no conocías pero que a fin de cuentas te toca enfrentar.

Amigos míos... simplemente son de las mejores cosas que me han pasado en ésta vida, son aquello que la vida me ha regalado y a lo que no pienso renunciar.
Perdón por todo aquello que alguna vez hice mal, no espero que ésto borre el pasado, todo eso que hice mal... simplemente que los haga ver que hoy tengo conciencia de cuando obré de una manera poco digna de, ahora, recordar.

Kika, Sofi, Pepi, Isa, Diego... gracias por todo, los quiero demasiado. Espero que ni el tiempo ni la distancia nos separe. El punto es que ésta noche me dió toda esa locura que ya conocen y quise hablarles de esta forma... yo y mis cosas raras una vez mas, culpo a la burbuja, hacía tiempo que no me venía a visitar.




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miércoles, 9 de mayo de 2007

Así no vale








Y saber que amaneceré mañana y que veré el cielo azul a través de las ventanas que me muestran Santiago no basta. Quizás en otro momento habría sido aceptable y hasta normal, pero hoy no... hoy quiero más, quiero aquello que pienso y que no puede ser.
Balbuceas unas cuantas palabras en mi mente, traes las imágenes de un fugaz pasado, me miras y te vas, así como eres y no hay mas.
Así no vale, no valen los signos a medias, ¿por qué no eres capaz de tomarme del brazo y hacerme hablar? Quizás porque no lo quieres, no lo sientes y ni siquiera te lo has planteado. Dudo que hayas pensado en mí tanto como yo lo he hecho acerca de ti, que te atrapo en mi mente, entre ésta masa de confusos pensamientos para luego desmenuzar cada momento que hemos vivido juntos, revivo cada gesto, cada palabra como intentando encontrar alguna señal que me diga que sí, que sí vale la pena seguir. Pero no nos engañemos, así no se vale, las cosas claras... no se vale buscar detalles para luego seguir viendo como pasas por mi lado sin siquiera mirarme.
Duele verte, esa es la verdad, pero mas duele el sentir que me gusta mirarte de reojo, a escondidas, cuando nadie me ve, me gusta quedarme sentada viendo como vienes y vas, de un lado a otro siempre, esperando a que te acerques a preguntarme simplemente cómo me va, duele... ¿Sabías? Pero aún así me gusta y darme cuenta de eso duele aún mucho más, así no vale. No hay amor sin aquella otra mitad...